Sicus practica una viticultura respetuosa con el medio ambiente, sin utilizar herbicidas ni insecticidas, favoreciendo la biodiversidad de animales, insectos y plantas. En las palabras de Eduard Pié: “En la transformación de la uva intentamos garantizar la máxima expresión del fruto, asegurándonos que los aromas y gustos provienen exclusivamente de la uva. En algunos casos utilizamos recipientes porosos como las ánforas de arcilla que nos permiten micro-oxigenar el vino y a la vez respetar al máximos sus gustos y aromas”. De ahí que los vinos de Sicus sean la máxima expresión del terruño.
“Los vinos de Sicus, de Eduard Pie, son tan sutiles como un mosaico Romano, pero no te engañes, para cada una de las piedrecitas que forman la trama de esta bodega ha tenido que bajar a la cantera. Solo los que hacen muy bien su trabajo hacen que parezca sencillo.”